300 palestinos, entre ellos 79 niños, han muerto a manos de soldados y colonos israelíes desde los ataques de Hamás del 7 de octubre
rtve.es
La ONU denuncia en un informe el rápido deterioro de la calidad de vida y seguridad de los palestinos en Cisjordania y este de Jerusalén tras los ataques realizados por Hamas a Israel el pasado octubre.
Según los datos, entre el 7 de octubre y el 20 de noviembre se registró un incremento de las incursiones aéreas y terrestres israelíes sobre territorio cisjordano, saldándose con la muerte de al menos 300 civiles, 79 de ellos menores, así como decenas de heridos. De acuerdo con las estimaciones, el ejército de Israel acabó con la vida de 291 palestinos, siendo el resto de muertes provocadas por colonos israelíes.
“El uso de tácticas y armamento militares en contextos de aplicación de la ley, el uso de una fuerza innecesaria y desproporcionada, así como el empleo de restricción de movimiento amplias, arbitrarias y discriminatorias que afectan a los palestinos son extremadamente preocupantes”, ha señalado el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk. “Las violaciones documentadas en el informe repiten los patrones de otras registradas en el pasado dentro del contexto de la larga ocupación israelí en Cisjordania. Sin embargo, la intensidad de la violencia y represión es algo que no se había visto en años”, ha añadido.
El documento también arroja información sobre algunos de los episodios de mayor virulencia ocurridos entre el 7 de octubre y el 20 de noviembre. Especialmente violentos fueron el 19 y 20 de octubre, donde tras una incursión de más de 30 horas sobre el campo de refugiados de Nur Sham en Tulkarem (norte de Cisjordania ocupada), soldados y colonos israelíes emplearon fuerzas de asalto que se saldaron con la vida de 14 palestinos, seis de ellos niños, además de varios heridos y detenidos.
Aumento de la violencia de los colonos israelíes
El informe alerta del “preocupante incremento” de los actos violentos de los colonos israelíes que viven en la Cisjordania ocupada contra los palestinos. A lo largo de 2023 se registraron más de 1.200 ataques de milicias israelíes sobre propiedades palestinas, un 45 % más que en 2022, acabando en el proceso con la vida de 17 civiles. En Cisjordania hay actualmente unos 465.000 asentamientos ilegales israelíes, 230.000 más en el este de Jerusalén, una cifra que ha seguido creciendo gracias al apoyo de políticos israelíes.
#Gaza: I call for an immediate end to the use of military weapons and means during Israeli law enforcement operations, an end to ill-treatment & discriminatory restrictions of Palestinians – @volker_turk on the UN report on the human rights situation in the occupied West Bank
— UN Human Rights (@UNHumanRights) December 28, 2023
El Alto Comisionado señala que este ambiente de permisividad acelera dramáticamente el desplazamiento de palestinos de sus hogares. Entre el 7 de octubre y el 20 de noviembre, 143 hogares, incluidos 388 niños, fueron desplazados de las colinas del sur de Hebrón, valle del Jordán y este de Ramala debido a la violencia ejercida por los colonos, así como las restricciones de acceso a sus zonas de cultivo y pastoreo.
La ONU señala que “los principales puestos de control y entradas permanecen cerrados y, cuando se abren, se imponen extensos registros que retrasan el movimiento y exponen a los palestinos a ser arrestados y maltratados por las fuerzas de seguridad israelíes”. Esto, unido a la “presencia masiva de colonos y soldados israelíes en las carreteras”, provoca la imposibilidad de acceder a servicios imprescindibles como ambulancias o la llegada de productos a las tiendas.
Con este informe, el Alto Comisionado realiza un llamamiento a Israel para que adopte “medidas inmediatas, claras y efectivas para poner fin a la violencia de los colonos contra la población palestina” y se investiguen “todos los incidentes de violencia cometidos por los colonos y las fuerzas de seguridad israelíes”.
Detenciones ilegales
Desde que Israel lanzó la incursión militar sobre la franja de Gaza, sus tropas han arrestado a más de 4.700 palestinos en Cisjordania, 40 de ellos periodistas. De acuerdo con el informe de la ONU, durante las retenciones se han utilizado de manera reiterada tácticas de humillación contra los prisioneros. Así, muchos han sido desnudados, vendados y atados durante horas de brazos y piernas, además de sufrir agresiones físicas y, en algunos casos, sexuales.
“La deshumanización de palestinos que caracteriza la mayoría de las acciones de los colonos es perturbador y deben cesar de inmediato“, señala Volker Türk. El Alto Comisionado insta además a Israel a conceder el acceso al país a la Oficina de Derechos Humanos de la ONU y ha añadido que están dispuestos a informar de manera similar sobre los ataques del 7 de octubre.
Reacción de Israel
El portavoz de la presidencia israelí, Tal Heinrich, ha desestimado el informe calificándolo de “bastante ridículo”. “Minimiza por completo las principales amenazas a la seguridad israelíes en Judea y Samaria, donde existen bastiones de Hamás y Yihad Islámica”, señaló. Ha asegurado que los ataques de los colonos contra palestinos se trata de un “fenómeno casi marginal“, además de subrayar las palabras del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien afirma que ningún ciudadano puede tomar la justicia por su cuenta y se perseguirá a quienes violen la ley al margen de sus creencias religiosas o políticas.
Con respecto al aumento de las detenciones injustificadas que refleja el informe, Tal Heinrich afirma que todas ellas fueron realizadas exclusivamente a “sospechosos de terrorismo en ese área” y que continuarán “haciendo lo que sea necesario para mantener nuestra seguridad“.
